Hemos recibido con honda preocupación la noticia de que ya es firme la sentencia judicial que exige a los/as compañeros/as de La Molinera abandonar el edificio. Desde el PCE-Valladolid queremos hacer visible nuestro rechazo y dar todo nuestro apoyo a las personas que llevan años sosteniendo el proyecto.
La Molinera es más que el edificio que le da nombre. La Molinera representa la capacidad popular de construir proyectos sociales fuera de los marcos sistémicos. Frente a la ideología hegemónica del dinero y los intereses individuales, La Molinera, con sus puertas siempre abiertas, ofrece un espacio de cooperación y autogestión al servicio de los intereses sociales, que ha dado un nuevo tipo de vida a la ciudad. La Molinera no sólo es una referencia de activismo; también representa una ruptura con la ideología de la especulación.
Por eso molesta La Molinera. Detrás de esta sentencia no solamente está el interés especulativo directo del fondo buitre que ha comprado el edificio, sino también la vocación de acabar con un proyecto que pone en tela de juicio la sacrosanta propiedad privada y demuestra cómo lo colectivo es mejor para las personas y mejor para la ciudad. Tienen mucho miedo a que espacios como La Molinera puedan ser el germen de un poder popular que un día acabe con su dominación. Con esta sentencia, los tribunales se deshonran una vez y hacen visible que el aparato del Estado rinde tributo a los intereses empresariales por encima del interés social.
Por suerte, sabemos que La Molinera —insistimos— no es un edificio, sino un proyecto llamado a perdurar; y continuará donde está ahora o donde se den las mejores condiciones para estar.
Queremos añadir, por último, que cuando se aprecia de forma tan visible la contradicción entre los intereses colectivos y los del capital privado, no caben medias tintas. Hay que tomar posición; no tomarla también es tomarla. Y por ello, desde el PCE-Valladolid queremos decir que estamos con La Molinera y estaremos siempre con todos los proyectos contrahegemónicos de base popular.